Hay diferentes formas de agricultura, y entendemos que no siempre es fácil estar al tanto de todas ellas. Por eso queremos explicar las diferencias y posibles similitudes en este blog.
Examinaremos la agricultura convencional, ecológica y regenerativa.
Práctica/ Medida | convencional | ecológica | regenerativa |
Abono sintético | sí | no | no |
Pesticidas químicos | sí | no | no |
Aumento de la biodiversidad y medidas de protección de suelo | no | sí | sí |
Compost y abonos orgánicos | opcional | sí | sí |
Monocultivos | frecuente | raro | raro |
Rotación variada de cultivos | raro | frecuente | si |
Control de la erosión y renovación de suelos | raro | a menudo | si |
Empleo de sistemas agroforestales | raro | a menudo | si |
La tabla es un resumen genérico y no aplica a todos los tipos de cultivo. Cada agricultor trabaja de forma individual y adapta sus métodos a las condiciones y necesidades específicas de su explotación.
Agricultura convencional
La agricultura convencional se basa en el uso de fertilizantes sintéticos y pesticidas químicos para lograr altos rendimientos. A menudo se cultivan monocultivos, ya que permiten una gestión eficaz y la especialización de la explotación. El objetivo es maximizar la productividad y la rentabilidad. Las medidas de protección del medio ambiente y del suelo suelen desempeñar un papel menor que en los planteamientos ecológicos o regenerativos.
Agricultura ecológica
La agricultura ecológica persigue un planteamiento sostenible y respetuoso con el medio ambiente. No utiliza fertilizantes ni pesticidas sintéticos, sino alternativas orgánicas. El fomento de rotaciones variadas de cultivos y las medidas para mejorar la salud del suelo son elementos clave. La agricultura ecológica también está regulada y certificada, lo que genera confianza en la calidad y los métodos utilizados.
Agricultura regenerativa
La agricultura regenerativa va más allá de la agricultura ecológica. Su objetivo no es sólo prescindir de los aditivos químicos, sino también restaurar y mejorar activamente los suelos y los ecosistemas. Se utilizan métodos como la agrosilvicultura y la ganadería integrada. Mientras que la agricultura ecológica está regulada por certificados, la agricultura regenerativa (todavía) no está reconocida formalmente por una certificación oficial. Sin embargo, la diversidad de insectos, animales y plantas, así como la salud demostrable del suelo, hablan en favor de los efectos positivos de estos métodos sobre el medio ambiente.
Conclusión
Nuestra agricultura regenerativa se centra en la renovación y la salud del ecosistema. Al evitar el uso de productos químicos sintéticos y al aplicar prácticas regenerativas, contribuimos activamente a la protección y mejora del medio ambiente. Nuestro planteamiento va más allá de los requisitos de la agricultura ecológica al crear un sistema resistente que asegura el rendimiento y conserva los recursos naturales. Estamos convencidos de que con estos métodos podemos crear un futuro sostenible para las generaciones futuras.