Empecemos el proceso desde fuera hacia adentro.
¿Cuántas veces hemos cortado una naranja? probablemente más de las que podamos contar, pero lo más probable es que nos nos hayamos parado a analizar el interior de las naranjas. Por eso en este post vamos a diseccionar una de nuestras naranjas con la precisión de un cirujano, y vamos a explicaros al detalle las partes de una naranja, como se llaman y para qué sirven.
Lo primero que vemos al coger una naranja del árbol es el “exocarpo”. Esta palabra proviene del griego exo (afuera) y karpos( fruto). El exocarpo es la cáscara de color naranja. Contiene minúsculas vesículas que son prácticamente imperceptibles, las cuales contienen aceites aromáticos que proporcionan ese olor tan especial que tienen las naranjas.
Una vez abrimos la naranja podemos apreciar una capa de color blanco, esta capa se llama “mesocarpio” y es la parte interna de la corteza. El mesocarpio es rico en pectina, que según estudios realizados en Estados Unidos tiene propiedades anticancerígenas.
El “endocarpo” es la parte más apreciada de la naranja, la comúnmente conocida como pulpa. La parte que se come de la naranja es también rica en pectina aunque también contiene fibra.
Por último dentro del endocarpo de algunas variedades de naranjas podemos encontrar semillas, las cuales producen un aceite viscoso, amarillo y amargo rico en ácidos grasos.